Vallejo & Co. presenta una selección de poemas que conforman los 2 tomos de la obra poética completa de Osías Stutman. Los poemas “La pureza”, “(Los secretos)”, “(La visita)” y “Las memorias” pertenecen al primer volumen de sus poesías completas: Mis vidas galantes, 1988-2008; mientras que los poemas “El castigo”, “El cuarto personaje” y “Meteoros en Manchuria”, son parte del segundo volumen: El mar de Bohemia, 2003-2022.
Por Osías Stutman*
Crédito de las fotos Ed. Comba
Mis vidas galantes.
7 poemas de Osías Stutman
La pureza
Todo comienzo es secreto,
luego es desvelo afanoso
y se exhibe impúdico,
por los aires, inalcanzable ya.
(Los secretos)
What, what, what es palabra seria
de vida o muerte, fruto de inocencia,
madre de ignorancia. Fuente de víctimas
y decisiones afiebradas, de trágicos padres
llorando. Los abogados lo llaman
«il suo caso» en treinta idiomas, el aire
es denso, huele mal, incoloro como niebla.
«Turning inside out» es lo de adentro, afuera.
Son los ocultos secretos del cuerpo, senos
de la mente, vibrantes, movedizos,
y los muslos secos frotando uno contra otro
y un vértice de fuego, en llamas, sin música.
(La visita)
Me reconozco en muchas cabezas.
Veo ojos, cejas, ángulos de la boca,
rara encrucijada en el cuerpo, cabellos,
expresiones, líneas de carbón, colores,
un despliegue de rasgos en las caras
de armenios, italianos, mujeres, actores,
argelinos, cantantes, gente buscando agua
en el artesiano, la cruz roja, los lunares,
en el rostro alegre y en el desesperado.

Las memorias
Son la vida de oro
las palabras de otros.
Nuevos aires, ámbito
y sombra. Sombra
y sombras en la noche.
Son imagen y descenso,
son el viaje subterráneo
y son los sueños vistos.
Es hablar con la madre muerta
como los héroes griegos.
El castigo
La poesía es mi castigo,
es un personaje diario
de espuela y fusta leve.
Hoy y ayer su recuerdo
no me dejó respirar. Toco
sin retener en la mano
y las cosas se rompen
al contacto. Hoy me rodea
un mundo agitado, mundo
enemigo que se aleja
cada vez más de mi casa.
Miro perplejo ese cambio y
los agudos sonidos que produce
en el hablar común, ya incomprensible.
El cuarto personaje
Cuando hay tres en el libro,
los que quedan fuera
de las historias no hablan
nunca, no dicen nada,
sólo miran a los actores
de esa novela volcánica o pastoral,
cargados de deseos y pasiones,
coleccionando sus monólogos y suspiros.
No son lectores ni autores.
No son víctimas tampoco,
no son solidarios ni ansiosos,
no torturan ni son torturados.
Escuchan con respeto a los muertos
hablar, contar sus historias,
sus monólogos desde las tumbas,
con paciencia y esperanza.
No tienen sueño ni sudor
erótico. No tiemblan ni gritan.
Son inmateriales recuerdos de la memoria,
si alguna vez alguien los recuerda.
Meteoros en Manchuria
A Bruno Montané Krebs
La extravagancia de la narración
agota, hace transpirar al lector
y redundan ya las sorpresas. Meteoros
de Manchuria llueven aquí,
perforan mi paraguas, arruinan
mi soledad y amenazan la paz
sin límites. La tortuga en el aljibe
escucha, dueña del agua pura,
maestra de la pureza. Las personas
que el autor ama no envejecen,
pero otros notan ese cabello blanco
y los surcos junto a la boca
o el labio seco. Siempre amo tanto
que soy ciego sin par.
*(Buenos Aires-Argentina, 1933). Poeta y médico. En 1966 fue expulsado de la Universidad argentina por el gobierno militar y emigró a Minnesota (EE.UU.), en cuya universidad trabajó hasta 1971, año en que se trasladó a Nueva York para desempeñarse como profesor en la Cornell University y Memorial Sloan Kettering Cancer Center hasta 1999. Ha publicado más de doscientos trabajos científicos en las más prestigiosas revistas. Desde 1999 es Profesor Emérito de Memorial y reside en Barcelona (España). Entre 1958 y 1961 trabajó a tiempo parcial como corrector con Aldo Pellegrini y Olga Orozco en la Compañía General Fabril Editora, dirigida por Jacobo Muchnik en Buenos Aires (Argentina). En esos años escribió poesía y fue incluido por J.C. Martelli en la Antología de Poesía Nueva en la República Argentina (1961) junto a poetas como Pizarnik, Alonso, Madariaga, Aguirre o Gelman. Treinta años después publica su primer poema nuevo en Revista Atlántica de Cádiz (nº 4, 1992) y se publican sus primeros poemarios en otras revistas españolas. En 1998 publica su primer libro de poesía Los fragmentos personales. Editorial Comba ha reunido en dos tomos su largo recorrido poético y vital: Mis vidas galantes, 1988-2008 y El mar de Bohemia, 2003-2022.