INDETERMINADO, ABIERTO
[Figuraciones humanas parietales
en la cueva de las Combarelles]
Una línea dorsocaudal
planeando
una línea ventral
grabada en el techo del túnel por alguien boca arriba
Incipientes
cielo
y
tierra
*
El humano es indeterminado, inicialmente inconcluso
*
Torso femenino ladeado
tangente a
una línea equina cervicodorsal
la contingencia híbrida
*
Del muro de cuero de elefante
una despedazada no-cabeza con ojo triangular
sostenida por un jirón de palma y brazo en divergencias riverinas
Debajo flota un pecho inmenso, vencido,
el pez luna a través de calizas superficiales
*
Líneas germinantes plantadas en nalgas femeninas ascensionales,
portadoras del empuje,
una erección
*
¿Qué es un nódulo? Puede ser un pezón
del que se extiende un par de líneas
atravesando el barro hasta la piedra caliza,
como si por rayos equis
el canal de la vagina fuera más profundo
*
Sin ojos
cuya nariz
sólo el “vagón de la cabeza”
humaniza
*
¿Cuenca de máscara observando el dorso de la cabeza de alguien
o es aquello el abdomen de una araña?
El perfil revela un vejancón sin pelo, hocico de venado
*
Una pata trasera de caballo perfila un tronco de mujer,
su torso y cabeza enfalada dentro de la pierna,
sus ojos sacudidos mirando sin mirar
*
Grabado en caballo se marchita,
troncoangular, combado, sentado, gracioso
*
En la periferia entre naturaleza y naturaleza humana,
entre conciencia e inconciencia,
yo increciente
*
Sobre el filo de altar de una inmensa,
rayada, abierta vulva
sobrepuesto al costado de un caballo,
un contorno de mujer dorsocaudal establece su
porqué
*
Doblado hacia adelante, un hombre cabeza enfundada, combado por el [vientre
itifálico, gesticulando jódetes–
usando su trasero como espalda
gira hacia nosotros una media cabeza sin brazos y una pierna
como si fuera
*
Cabeza enfundada quizás mostrando el dedo
a un espectro de dinosaurio entumecido
cagando a la vez que se prepara a montar
un bálago de cuarto trasero
*
En un vientre de caballo
un proganto peludo se extiende y mira
al espejo sugerido por la mandíbula
*
En el fulcro de un muslo vertical
el bulto dorsoventrocaudal
*
Jirones de cabeza y cuello de un feto de fantasma
hasta su único ojo en horizontes
*
Un montón de vulvas corneadas
*
Una humana erección en ascenso
con una cabeza de antílope bajando
como en una circular revolución
Como si el siglo XX estuviera empotrado en ese eje
*
Cabeza de muerte blindada con labios de mandíbula vulvares,
escotada,
embarbada,
con escudo en la nariz,
un ojo un guijarro,
el otro una vulva brotada,
sin boca y
tachado
[para Monique y Claude Archambeau]
LA COSA ES, PARA QUEDARSE EN LA NIGREDO
todas las etapas activas, a la vez,
progresión, pero sólo la que llega
con la práctica del arte
en el arte –en la popa
del arte,
su popa a vela está a nuestras espaldas
donde aprendemos,
y si tú no aprendes…
pero aquí estoy yo, de nuevo, en absoluto.
Uno debe aprender,
mas el aprendizaje, igual que una experiencia, no es una progresión,
los tempranos rudimentos, las agudas soluciones,
se entremezclan
se interna uno en el aire nocturnal
de primavera, intoxicado de sirenas gimientes,
de confusos brotes…
la toxina soy yo, uno debe afirmar,
yo soy el responsable del minuto de mí en el planeta.
…lo que no es verdad,
pero tan cierto
como que la carne de uno se deshace.
León Félix Batista (Santo Domingo, República Dominicana, 1964), ha publicado seis libros de poesía: El Oscuro Semejante (1989), Negro Eterno, Vicio, Burdel Nirvana, Mosaico Fluido y Pseudolibro. Existen varias ediciones de algunos de estos libros: Se borra si es leído, poesía 1989-99 (2000); Crónico –segunda edición de Vicio; Prosa del que está en la esfera; Inflamable, Delirium semen, Caducidad y Sin textos no hay paradiso.